Aunque circulan en algunos blogs, la entrevista del jueves 11 a la ministra del Interior en La República y el análisis-crónica de Gustavo Gorriti del mismo día en Caretas, los incluyo para que más personas tengan acceso a ellos. Es necesario contrastar la versión recogida entre policías con las declaraciones de la titular del sector.

La policía como víctima (gracias a El Morsa, fuente Caretas 11/6/09)

El informe de inteligencia que me dan a mí no es muy detallado (Fuente: La República 11/6/09)

Alan García quiso restar credibilidad al texto de Gorriti indicando que así escriben los periodistas de escritorio, en tanto que Cabanillas expresó que no leía textos escritos con apasionamiento.

El periodista les respondió a ambos así (La foto al final de dicho enlace no tiene pierde)

P.S. Un pronunciamento del Instituto de Defensa Legal distribuido hoy plantea que la detención del abogado Carlos Rivera puede estar vinculada con la investigación en las fuentes policiales realizada por Gorriti, quien colabora con el área de seguridad ciudadana del Instituto de Defensa Legal (IDL), y las denuncias sobre presuntas desapariciones en Bagua realizadas por los abogados Ernesto de la Jara y Javier la Rosa de esa misma institución.
Rivera es uno de los abogados de la parte civil en los procesos contra el ex presidente Alberto Fujimori y también en juicios por violación a los derechos humanos cometidos durante el primer gobierno de Alan García (Pucará y El Frontón, entre otros).

Sólo una breve nota para deslindar con Uri Ben, director de La Razón, quien cita a Jorge Morelli, a un comentarista del Blog del Morsa y a mí en su editorial de hoy para criticar a Pablo O’Brien. Dicho diario es panfletario, defensor de fujimoristas corruptos, y de militares retrógrados que no respetan su institución, por lo cual siento verguenza de que mi nombre aparezca allí. La Razón es de Montecristo, empresa creada por quienes recibieron dinero del SIN para servir con la línea editorial de sus medios a operaciones psicosociales en 1999-2000.
Aprovecho para recomendar la entrega de hoy del semanario Caretas pues los documentos de compra del Triggerfish 4080 -por la Agregaduría Naval en Washington en el 2000- dejan sin asidero las declaraciones del ministro Antero Flores Aráoz, quien insiste en defender lo indefendible.
También es valioso el análisis de Gustavo Gorriti sobre las consecuencias del espionaje industrial en un gobierno corrupto. El texto completo de Gorriti no está disponible en línea en la revista, pero transcribo aquí el segmento más revelador:
«¿Por qué los espías se preocuparon en filtrar su información a la prensa? Voy a buscar desarrollar el tema en mayor profundidad la semana entrante, pero la razón fundamental es que, en un gobierno corrupto, la mejor forma de lograr un efecto para quienes encargan el espionaje industrial es mediante el escándalo medido. Es la teoría de la explosión controlada, como se puso en práctica varias veces durante el gobierno de Toledo. Pero aquí la explosión resultó desbocada y aunque el efecto fue mucho mayor que el deseado, según parece, los espías y sus clientes perdieron el control.
(…)
Así como la virtud emerge a veces del pecado, el desboque del chuponeo puede ayudar a limpiar en algo la corrupción y, sobre todo, a conocerla mucho mejor».
El Morsa indica que ha colgado el texto completo de Gorriti en su blog.
La entrevista del maestro Edmundo Cruz a Pablo O’Brien
P.S. Ha habido un par de comentarios a la nota de ayer sobre O’Brien pero en lenguaje casi vulgar (contra el periodista) por ello no los he aprobado. Los invito a expresarse nuevamente usando un lenguaje más respetuoso.

Uceda, Gorriti y Alvarez Rodrich en concurrido panel de IPYS. (Foto de Carlos Garcia)

Uceda, Gorriti y Alvarez Rodrich en concurrido panel de IPYS. (Foto de Xaxo García)

Luego del panel sobre los petroaudios realizado hace unas horas en IPYS, rescato algunas frases para ubicarnos mejor con respecto a los medios y en particular los periódicos limeños. Gustavo Gorriti confirmó que sí ha habido una pérdida de pluralidad -en la oferta informativa- a raíz del cambio de directorio en el Grupo El Comercio y la salida de Augusto Alvarez Rodrich de Perú.21. También aclaró que antes de octubre no vivíamos en un Camelot periodístico, sino que después del 2000 las presiones de los intereses comerciales y políticos habían ahogado el periodismo de investigación y limitado el rango de las informaciones que se cubren.
Augusto Alvarez Rodrich arrancó aplausos espontáneos del auditorio cuando dijo que el Gobierno tiene buenos amigos en los medios y quiere tener más.
Gustavo Mohme declinó comentar públicamente si La República ha tenido algún incremento en las ventas a raíz de la salida del director de Perú.21. Me respondió que ese asunto de las ventas es de gerentes y no del área periodística: raro que no haya querido ser transparente en un asunto tan rutinario para los directores como saber si subió o no la venta. Mi pregunta no era para incomodar a Augusto Alvarez Rodrich pero Mohme entendió que sí y prefirió no responder.
Mirko Lauer comentó que se ha hecho demasiado escándalo para al final tener sólo ‘dos pendejeretes‘ que ahora ya enfrentan un proceso judicial. Marco Zileri sostiene que no hay ningún alto funcionario involucrado ni lo habrá, y Juan Paredes Castro argumenta que El Comercio no pretende -como se dice- respaldar al gobierno y defender la gobernabilidad.
Para cerrar, en la línea de cercanía con la realidad, Gorriti resaltó la decadencia de los medios tradicionales para investigar y cubrir hechos de relevancia pública y apuntó al esfuerzo inicial de los blogs que, tanto aquí como en otros países, ayudan a desarrollar investigaciones, casos y agenda omitidos por los medios más grandes o principales.
Notas al pie: Lauer ha asumido la dirección del Instituto Prensa y Sociedad (IPYS).
Este mediodía continuamos el debate en la PUCP en el pabellón Z con Santiago Pedraglio y Rómulo Franco, entre otros, en panel organizado por Número Zero.